En España cada año se diagnostican unos 1500 nuevos casos de cáncer infantil y juvenil, de los cuales 1100 corresponden a menores de 0 a 14 años y 400 a adolescentes. Gracias a la investigación, en la actualidad la supervivencia entre niños de 0 a 14 años es del 80%, aun así, el cáncer supone la primera causa de muerte por enfermedad de 5 a 14 años y la segunda causa de muerte entre los 15 y 24 años, detrás de los accidentes en las carreteras.

El cáncer infantil engloba un conjunto de tumores que pueden afectar cualquier órgano o tejido. Los tumores infantiles más frecuentes incluyen las leucemias, que suponen el 30% del total, los tumores del sistema nervioso central, que representan el 22%, los linfomas, con el 13% de los casos, los tumores óseos, con un 6%, y los tumores renales, que suponen el 5% del total. Todos ellos tienen tratamiento y pronóstico diferentes, pero tiene en común que afectan de forma importante la calidad de vida de los pacientes y sus familias.

Los grandes avances en el tratamiento han permitido que en algunos tipos de cáncer se consiga prácticamente la curación, y que en general se puedan curar más del 70% de los tumores en menores de 14 años. Asimismo, es de gran importancia el diagnóstico prematuro.

Con el objetivo de concienciar a la sociedad sobre esta enfermedad, en España cada año el 21 de diciembre se celebra el Día Nacional del niño con Cáncer, por iniciativa de la Federación Española de Padres de niños con Cáncer y con el apoyo del Ministerio de Sanidad. Con esta celebración se pretende dar a conocer el cáncer infantil y luchar para que todos los niños, independientemente de donde nazcan o vivan, tengan las mismas oportunidades de diagnóstico, atención y tratamiento.

Como símbolo del coraje y la valentía de la lucha contra el cáncer infantil y juvenil tanto de los pacientes como de sus familiares se utiliza el lazo dorado, que representa el color de la esperanza.